Nuestros productos son objeto de pruebas sistemáticas de inocuidad y de eficacia.
Todos nuestros productos están sometidos a pruebas de tolerancia conducidas bajo el control de expertos dermatólogos, alergólogos y toxicólogos independientes en todo el mundo.
Estos últimos años, se han llevado a cabo más de 1000 estudios clínicos en cerca de 30 países. Han finalizado con publicaciones regulares en revistas científicas de referencia.
Por exigencia, todos nuestros productos respetan y, a menudo, van más allá de las recomendaciones más exigentes de las autoridades sanitarias y de las sociedades científicas de dermatología.
La seguridad y el respeto de cada sensibilidad son nuestra prioridad. Más allá de nuestros principios basados en la ecobiología para la selección de ingredientes y de nuestros exigentes procesos de homologación, hemos implementado un riguroso seguimiento de Cosmetovigilancia. Se trata de un proceso de alerta a escala internacional, para que cada efecto no deseado y cada caso de intolerancia puedan ser analizados.